Continuando con nuestro proyecto de investigaciòn decidimos construir un horno solar para comprobar si podemos utilizar la energìa tèrmica del Sol para cocinar.
Las instrucciones para construir el horno las obtuvimos de la revista que los funcionarios de U.T.E nos regalaron al comienzo del año.
Los materiales que utilizamos fueron:
- 2 cajas de cartón (una más grande que la otra).
- Papel aluminio
- Espuma plst
- Cinta adhesiva
- Bandeja de aluminio.
- Pintura negro mate.
- Papel acetato.
Forramos las dos cajas con papel aluminio por dentro y por fuera.
Luego colocamos una dentro de la otra y rellenamos el espacio con espuma plast ya que es un buen aislante de la humedad y ayuda a conservar el calor que ingresará a la caja. Ese calor es el que hace que los alimentos se cocinen.
Cerramos el fondo de la caja y lo sellamos con cinta adhesiva.
Forramos la tapa de la caja más grande con papel aluminio (buen reflector de los rayos solares) y hacemos una ventanita para que entren por allí los rayos del Sol.
Forramos el hueco de la ventana con papel acetato transparente (permite que ingresen los rayos solares pero no deja escapar la energía térmica de la caja).
En el fondo de la caja más chica colocamos una bandeja de aluminio, pintada de color negro mate. Ésta será nuestra asadera para cocinar los alimentos.
Días después intentamos hacer una compota de manzanas. La verdad es que no logró
cocinarse pero sí notamos un aumento de temperatura en la compota.
Creemos que esto sucedió porque es invierno y en esta zona de nuestro país y en esta estación del año (según el mapa solar del Uruguay) la radiación solar es muy baja. Por esto decidimos que repetiremos la experiencia en los últimos meses de clase, cuando la intensidad de los rayos solares sea mayor en esta zona del planeta.
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